lunes, 9 de junio de 2014

FORTUNA fue atestiguarte...

Hace un par de días alguien me recomendó la muestra "Fortuna"  de William Kentridge y la tildó de IMPERDIBLE...y que decirles que me picó la curiosidad de saber de quien se trataba y por qué afirmaba tal diagnóstico.

Hacia el Museo del Banco de la República me dirigí para constatar lo dicho. El museo está ubicado en la intersección de la Carrera 4 y la calle 11, y en sus instalaciones aloja al Museo Botero y al Museo Numismático, conformando así, un rincón cultural. 

El museo es bellísimo, tiene una arquitectura tipo "caja blanca", con fachada neutra y sencilla donde se aboga por la sustentabilidad.







Fortuna es una selección de 100 obras y es una semblanza de 25 años de trabajo artístico. 



Sus metamorfosis lo distinguen....

 William Kentridge nació en Johannesburgo en el año 1955. Situémonos un poco en el contexto de Sudáfrica por aquellos años, donde se impusieron modelos de segregación racial por parte de extremistas del Nacionalismo afrikaner, quienes ya habían sancionado leyes que limitaban los derechos civiles de los negros que, paradójicamente, constituían la población mayoritaria.
 Los afríkaners consolidaron el Partido Nacional que llegó al poder en 1948, instaurando con el tiempo el apartheid.



Es justamente en este contexto, en el que nació el niño William.  Fue testigo del régimen establecido y creció en un hogar donde se debatía la legitimidad ética y política del régimen. Su familia, como la mayoría de los judíos sudafricanos, había emigrado desde Lituania. Sus padres, abogados activos entonces, trabajaban defendiendo los derechos civiles de las poblaciones oprimidas, lo que incidió de manera decisiva en la forma como Kentridge se relacionaría con las fricciones sociales de su tiempo.

"Fortuna sugiere también una celebración de la excentricidad que no es adversa al compromiso político". (Lilian Tone, curadora).


Tempranamente tuvo un acercamiento al dibujo, que lo llevaría a estudiar arte después de obtener su grado en Política y Estudios Africanos. En 1989, realizó Johannesburgo, 2a ciudad más grandiosa después de París, una animación  tipo "stop-motion" y producida a partir de dibujos en carboncillo.  


Volviendo a la muestra, uno puede atestiguar esos dibujos hechos en carboncillos, esculturas y animaciones, en las que aborda temas locales con una fuerte carga política y que al mismo tiempo, son poéticas y evocativas. Y es que  sus obras no sólo se refiere a un momento histórico, también a una búsqueda personal que le permitió ver que hay múltiples formas para entender el mundo. 



Su metamorfosis y las inherentes características de sus animaciones relacionadas con su elaboración y producción un tanto "primitivas", así como el sentido con el proceso de transformación que sufre el dibujo mientras es filmado lo destacan universalmente. 

Inicialmente, realiza un único dibujo sobre el que efectúa los cambios necesarios para dar vida a la secuencia. Es decir, deja siempre las huellas de los trazos borrados considerados como una alusión al paso del tiempo y a la vulnerabilidad de la memoria. Tal es así, que "remover y borrar" se convirtieron en elementos fundamentales en el proceso de su obra.



Estas particulares formas de trabajar se pueden visualizar en obras multimedias como UBU cuenta la verdad (1997) o Procesión de sombras (1999).

 Ésta última, llama mucho la atención por el uso de marionetas negras que caminan incesantemente sobre un fondo blanco, proyectando figuras apenas reconocibles, construidas a partir de papel rasgado.



Asimismo, en el segundo piso del museo, recrearon su "taller" con obras que materializan sus estudios sobre la percepción visual, las imágenes estereoscópicas, la óptica y en cómo nos hacemos conscientes del proceso de ver...
...Y Kentridge si que ha visto, porque tuvo la genialidad de convertir materiales de uso cotidianos, incluso encontrados en la calle como cartón, cadenas, trípode, resortes, cables de acero, maderas y hasta rueda de bicicleta, y a partir de estos "desechos" construyó ricas obras. 




Si bien su trabajo se refiere a un tema local, tiene un carácter universal, que le ha permitido presentarse en espacios como la Tate Modern (Londres), la Pinacoteca de San Pablo (Brasil) o el MOMA de Nueva York.  

Esa es la Fortuna de Kentridge, unir fragmentos de recuerdos y memorias de una manera conmovedora y universal.

   
Tip: de obsequio te entregan 3 postales para regalar a tus seres queridos y un Idea+Imágenes para que realices tu propia obra y la compartas con tus amigos. 


La muestra se desarrolla hasta el 7 de Julio, la entrada es Libre y gratuita


Qué más podés pedir? Para no perdérsela!

Pd:  Horarios: Los museos están abiertos de lunes a sábado de 9:00 a.m. a 7:00 p.m. Último ingreso de público 6:30 p.m. Cerrados los martes.
Domingos y festivos de 10:00 a.m. a 5:00 p.m. Último ingreso de público 4:30 p.m.


6 comentarios:

  1. MUY BUENA LA NOTA FLORENCIA!! SEGUI INFORMANDO ASI!! SALU2!

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  2. Muchas gracias Hernán! me alegro que te haya gustado! Un fuerte abrazo!

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  3. Me encantó Flor! Muy inspirador William Kentridge..qué pena no poder asistir, pero un placer verlo através de tu ojos..Avanti! :)

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  4. Muchas gracias Marianela! Me alegro que te haya gustado! Un fuerte abrazo!

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  5. Me encanta como escribes y trámites lo que ves!!! Haces que se teletrasporte sintiendolo en vivo y en directo!!

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  6. Muchas gracias Migue! me alegro que lo disfrutes! Un abrazote!

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